“DISRUPCIÓN COMO ESTRATEGIA EMPRESARIAL” JORNADA EMPRESARIAL FORO ILUSIONANDO
(Artículo publicado en Murcia Economía)
Definición de la Real Academia de la Lengua para el término Disrupción: rotura o interrupción brusca. Así, este sustantivo puede ser utilizado para aludir a un cambio en el modo de hacer las cosas cuando este suponga una rotura o interrupción brusca respecto al modo en que venían realizándose hasta el momento.
No es término habitual en ámbitos empresariales, pero hace pocos días, Juan de Dios Hernández, nos lo proponía como base para la estrategia empresarial. Y lo hacía como CEO de PROSUR, una empresa que ha pasado de vender productos para carniceros en un ámbito local, a proveer internacionalmente de soluciones para conservar alimentos de forma natural a todo tipo de empresas del sector de la alimentación.
Su inquietud había sido siempre hacer algo diferente. Pero para poder hacer algo diferente tienes que tener una visión diferente. Y en este sentido Juan de Dios lo tenía “fácil”, pues no es un empresario al uso. Juan de Dios es un científico (y doctor) metido a empresario, que venía ya de haber sido Director de Innovación en Los Quijales, hasta que en el año 2000 tomó el relevo generacional en la Dirección General de la empresa familiar.
En aquel entonces los aditivos químicos eran la única alternativa comercial para conservar la comida. Él quería cambiar eso y tenía la capacidad de investigar. Estuvo varios años investigando hasta que consiguieron sacar su primer producto, y tras diez años “predicando en el desierto” sin conseguir grandes contratos, les llegó la gran oportunidad con Nestlé. Ese fue su break even, que llegó además cuando comenzaban a explorar la internacionalización.
Juan de Dios nos contó como afrontaron el cambio generacional y de modelo de negocio. Estas fueron las claves de su éxito:
EQUIPO: Para ser el mejor necesitas a la mejor gente. La gente es lo más importante, el equipo lo es todo. Lo más difícil es encontrar talento, es raro y escaso. Por eso tienen un programa de becas para formar a gente, pues les sirve como medio para localizar talento. El talento por cierto hay que pagarlo, si no se va. Y darle buenos medios de trabajo. Y si es joven, además tiene que tener un horario, sino también se va. Y capacidad de promoción. En definitiva, hay que saber valorar el talento y cuidarlo.
DISRUPCIÓN: La disrupción es algo que tiene que estar en continuo movimiento, debe convertirse en cultura de empresa. Porque, en el mundo que vivimos actualmente, el ritmo de cambio es vertiginoso, lo que hoy vale se queda obsoleto en 3 años. Cualquier Sturtup se fundamenta en una idea disruptiva, pero también en que después se pueda industrializar y en que alguien quiera comprar lo que vende, y eso fue lo que hicieron ellos para transformar la compañía. Con el valor añadido de que su idea disruptiva trataba sobre la mejora de la salud de las personas, una idea de negocio basada en mejorar la alimentación en el mundo.
TRANSFORMACIÓN/PROFESIONALIZACIÓN: Cuando llegó a la Dirección General no sólo sentía que había un rumbo que cambiar, sino que también había una falta importante de profesionalización en la gestión de la empresa y una posición financiera que comprometía su viabilidad. Lo primero que hizo fue profesionalizar la gestión financiera incorporando el personal necesario, obtener un seguro de crédito y conseguir financiación. A la vez que desarrollaba la visión que tenía en una idea de negocio concreta para alinear al equipo entorno a una misma Ilusión, Proyecto y Futuro. Pero obviamente la transformación no se produce de la noche a mañana, tienes que seguir haciendo “lo que te da de comer” pero sin dejar de hacer e introducir “tus cosas diferentes”, que no tiene porqué ser solo el producto, puede ser la forma de presentarlo, de producirlo, de comunicar, etc. Y para diferenciarte, tienes que investigar.
INVESTIGACIÓN: Conseguir el retorno directo de las investigaciones es muy difícil, pero hay que estar investigando constantemente, porque te ayuda a mejorar y es la única manera de desarrollar la capacidad de adaptarte al cambio constante. Por eso su inversión en I+D es importantísima. Han desarrollado incluso un departamento de anatomía patológica, para poder certificar los beneficios que para la salud conllevan sus productos. Otro campo en el que llevan años investigando es en las aplicaciones que la Inteligencia Artificial puede tener en su campo, porque como él mismo dice “la disrupción te tiene que pillar trabajando”.
INNOVACIÓN: La innovación siempre va por delante de la legislación y eso hay que tenerlo presente porque puede ser una ventaja o no. Cuando vendes algo innovador tienes que ser capaz de convencer a tus clientes de que den un paso de innovación. En ese sentido hay dos tipos de clientes, los innovadores, que tienen ya la tendencia a abrir camino, y los followers, que siguen a los otros, y hay que saber identificarlos para centrar los esfuerzos. Y vender algo innovador requiere también venderlo de forma innovadora, en nuestro caso tuvimos que recurrir a generar la necesidad en grandes superficies y en restaurantes de tal forma que ellos demandaran nuestro producto.
ABRIR MERCADOS: En España no hay una preocupación importante todavía respecto a los aditivos químicos, a pesar de sus efectos negativos sobre la salud, pero en el resto de Europa sí. Eso nos obligó a abrir nuevos mercados. Abrir un mercado es sólo cuestión de hacer un primer viaje, conoces a un persona que te da confianza y poco a poco. Sólo necesitas el valor de dar el primer paso. Para poder abrir mercados tienes que saber idiomas. Pero en cualquier caso, en un mundo de competencia globalizada, como mínimo tienes que dominar muy bien el inglés.
DELEGAR PARA CRECER: Hay que saber delegar, si no tu equipo no se desarrolla. Pero a la gente le cuesta mucho delegar porque significa soltar poder. Pero tienes que ser capaz de ver cuando ya no puedes con todo y necesitas ayuda, porque entonces no rindes. La clave es comprender dónde eres valioso, o hacerle ver a tu gente dónde lo es. Juan de Dios nos confesaba que su teléfono ahora suena muy poco y cómo ha pasado de trabajar todas las horas posibles a estar ocupado la mitad de la mitad de ese tiempo, porque tiene equipo y confía en él. Si no das confianza no hay delegación. Al hilo de esto recomiendo por cierto la lectura del artículo de nuestra compañera Encarna Teruel : )
Estamos inmersos en una época frenética que se mueve a un ritmo vertiginoso, de cambio radical, total y absoluto, debido a la globalización, internet y el desarrollo de la tecnología que avanza a un ritmo exponencial. En muy pocos años estamos cambiando nuestra forma de hacer las cosas, nuestras preocupaciones, valores o prioridades, nuestra forma de relacionarnos, de consumir… Teniendo en cuenta todo esto, no parece que sea mala idea adoptar ese cambio radical, como una estrategia de adaptación al medio para la supervivencia de la empresa. Y si además esa disrupción la enfocamos a ayudar a resolver los problemas globales a los que nos enfrentamos, si nos sumamos a la nueva conciencia social global y destinamos nuestro talento y nuestro valor a ayudar a las personas a tener una vida mejor o a que nuestro desarrollo sea realmente sostenible, estaremos garantizando en mayor medida la aceptación en el mercado de nuestro producto o servicio y el éxito de nuestra empresa.
Es una ley de la naturaleza enunciada por Charles Darwin: “la especie que sobrevive no es la más fuerte ni la más inteligente, sino la que mejor se adapta al cambio”. O dicho también por otro grande, Bruce Lee: “Be water my friend” : )
Toño Santa-Cruz. Arquitecto
Director Gerente de Santa+Cruz Arquitectura
Miembro Junta Directiva Foro Ilusionando